Cómo gestionar eficazmente a las personas – propietarios de pequeñas empresas
Como propietario de una pequeña empresa, uno de los aspectos más difíciles de gestionar, además de la reducción de costes, es la gestión de las personas. Dirigir una pequeña empresa puede ser difícil, sencillamente porque no puedes hacerlo todo (obviamente) y conseguir que otras personas hagan las cosas por ti como tú quieres no es nada fácil.
La clave del éxito es la capacidad de gestionar a las personas con eficacia. Aquí tienes 4 consejos que te ayudarán en el camino…
Comunicar con claridad
El primer paso para tener éxito en el trabajo en equipo y en la dinámica de grupo es una comunicación clara. Haz que la gente sepa exactamente lo que esperas, cuantifica los resultados, fija los plazos y, si es posible, hazles saber lo que está en juego. Si eres diseñador de moda, hazle saber a tu sastre que quieres que te quede bien, que necesitas que el traje esté listo para (qué fecha) y hazle saber también lo importante que es cumplir los plazos.
Recompensar y castigar
La mayoría de las veces la gente no entrega o no nos da lo que buscamos simplemente porque no hay ninguna penalización por la ineficacia. Si los grandes del negocio de las pizzas nos dan pizzas gratis en caso de que no las entreguen en media hora, ¿no deberíamos aprender algo de esto?
Premie y castigue para conseguir lo que se propone. Premiar a los empleados por su eficiencia impulsará la productividad y castigarlos por su ineficacia garantizará que el trabajo se realice y se cometan menos errores.
Delegado
Una de las principales razones por las que la gente fracasa en la vida y en los negocios es porque no saben delegar. Una sola persona no puede hacerlo todo; no tienes el talento, la capacidad, el tiempo, la energía o las habilidades para hacerlo todo, así que delega en otros las tareas que no puedes hacer.
Identifica qué es lo que tú y sólo tú puedes hacer y deja el resto a otras personas. Si tu fuerte es el diseño, entonces hazlo y deja el trabajo manual a un artesano. La clave del éxito de la delegación es la capacidad de reconocer quién es mejor que tú y en qué. Un buen líder es el que toma a personas que son mejores que él en su equipo y las motiva para que den lo mejor de sí mismas.
Confíe en
Una vez que le das una tarea a alguien, asegúrate de hacerle saber que confías plenamente en él. Siempre que le doy a alguien algo que hacer, le hago saber que después de confiarle la tarea, he dejado de preocuparme por ella. Esa es mi manera de hacerles saber… que confío en ti.
Si esa persona te decepciona, existe un riesgo, pero al menos sabrás que no puedes trabajar con ella en el futuro. Construir relaciones de confianza en el trabajo es importante, así que asegúrate de invertir tiempo y esfuerzo en ello.
Otra buena forma de conseguir que la gente trabaje mejor es asociarse con ella.